Desde un iPhone, la escritora argentina Ana María Shua evaluó los finalistas del certamen #MicroMetro y junto al escritor puertorriqueño Elidio La Torre Lagares seleccionaron unánimemente como ganador un cuento que en 127 caracteres relataba precisamente sobre el uso de un iPhone.
“Desangrado encontró a su hermano. Sacó su iPhone y le tomó una foto”, con este breve, pero impactante relato la periodista Nindi Méndez ganó sobre otras 344 participaciones el concurso de microrelatos auspiciado por Metro como parte del Festival de la Palabra. Hubo una mención especial para la participación de @AnonimaPapaya con el siguiente cuento: “Dicen que el tiempo se ha fugado. Dicen que no podía más con el peso de curarlo todo”.
Otros finalistas fueron
· Gladys Guerra con: “Entraron a la catedral y le ordenó que limpiara sus pecados. La niña agarró un paño y empezó a limpiar las figura de los santos”.
· @alayamagdalena con: “Con el dólar que el novio de su madre le embutía en el puño cerrado tras servirse de ella, Rosita pagaba un arma en layaway”.
· @chancletoid con: “El gato despertó convertido en insecto. Al maullar ladró. Otros gatos ya no lo quisieron. La urbe había despedazado sus botas”.
· @reneorellano con: “Su cuerpo se encontró sin vida en el segundo vagón del último tren a Santurce. Fue una muerte apacible y solo costó 75 centavos”.
· @tonyaholic con: “El Príncipe Azul quedó desempleado. Se recogen artículos de primera necesidad; coopere con manzanas o con damiselas en apuros”.
· @Psicosis_total con: “Post-Mortem Ahora todos hablan de lo buena que era, pero nadie decía nada cuando escuchaban los gritos que venían desde su casa”.
· Maité Ramos Ortiz con: “Vende amor los fines de semana en el mismo semáforo de la Fernández Juncos. Es escritora de novelas rosa”.
· Isabel M. Zorrilla con: “Al salir el primer rayo de sol ella le lleno la cara de besos. El se fue a pedir al semáforo y ella lo siguió meneando la cola”.
· César Romero Reyes con: “Sara curaba el dolor de su realidad con una inyección de olvido, luego dibujaba su sonrisa en una sucia ventana de cristal”.
· Edwin E. Figueroa con: “La ciudad se encaprichó en cambiarte el nombre a Jane Doe. Te enterró con nombre de blanco. ¡Ay Julia de Burgos, así te llamaron!”.
· Alessandra Volta con: “No nos culpen de todas sus fechorías, malnacidos. Al fin y al cabo, Eva y yo sólo cometimos el Pecado Original”.
· Anu Ramos con: “A nadie le importó que los pájaros abandonaran la ciudad. Estaban ocupados tuiteando”.
· @CynObe con: “Y renació el cine en el país, guiones refrescantes y dramas originales. Nadie imaginó cuan útiles serían las cámaras en el tren”.
· Anu Ramos con: “Nadie supo porqué llevaban bufandas, pantimedias y botas. Fue tarde cuando recordaron que la ciudad era caribeña. Eran asfalto”.
· @CynObe con: “Cada día voy a la universidad con mi bulto vacío a buscar conocimiento. Él, con dificultad, va con su bulto lleno a devolver”.
· Tania Sánchez con: “Para cuando su computadora le dijo que no había más actualizaciones, sus niños ya eran adultos y se habían ido de casa”.